Introducción
En el cielo Dios es el padre de la familia celestial así como el hombre es el padre de la familia terrenal. Dios nos ha invitado a ser parte de Su familia según lo dicen las escrituras en Efesios que dice así: "Así que ya no sois extraños ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios."
¡Qué linda es la familia
que le sirve al Señor,
Es algo digno de encomio,
de alabanza y honor!
En su hogar no existe el pleito
el celo ni el rencor,
Solo existe la armonía
la comprensión y el amor.
El primado es del Señor
y en todo gracias le dan,
Y a las Santas Escrituras
le dan especial lugar.
Y cuando viene la prueba
el dolor o la aflicción,
a Dios ellos se allegan
con llanto y oración.
Dios los mira con ternura,
y contesta sus oraciones,
Les da de Su fortaleza
y paz a sus corazones.
El los libra de peligros
y les da Su protección.
Los cobija con Su manto
e imparte Su bendición.
Es la familia cristiana
diferente a las demás,
Por eso vive apartada
porque así le agrada más.
Una linda recompensa
Dios le tiene preparada,
Es una bella mansión
que le tiene asegurada.
Y en las bodas del cordero
estarán participando
gozándose con los santos
y al Redentor adorando.
El escogió para sí
de todo género humano
a un pueblo que le alabe
y que vaya de Su mano.
En este día exhorto
a la familia cristiana
a que se siga esforzando
y agradando a quien los ama.
Sirviéndole con amor
con temor y reverencia,
Porque muy pronto estaremos
ante Su santa presencia.
Y allí todos estaremos
dándole gloria y honor
al Señor de los señores,
¡Nuestro Dios y Salvador!
Precioso grupo de niños
Llamados joyas de Cristo,
Les dedico con cariño
Este pensamiento escrito.
Son niños excepcionales
Que alaban al Creador...
Con canticos espirituales,
Con ternura y con amor.
Que predican la palabra
Y el camino del Señor,
Obedientes a sus padres
Y estudiantes de honor.
Son niños muy inocentes
Al pecado y corrupcion,
Criados muy diferentes;
Llenos de poder y uncion.
Instruidos en el templo
Para servir al Señor,
Por eso son un ejemplo
A este mundo pecador.
Son niños muy abnegados
Que se esfuerzan en servir
Al Dios que los ha salvado
Y enseñado a vivir.
A vivir en santidad
Y a honrar al Creador,
A predicar la verdad
Y a alabarle con fervor.
Conocidos no del mundo
Mas del pueblo del Señor,
Amados y protegidos...
Por Jesus... el Salvador.
Son como joyas preciosas
Que en tinieblas resplandecen,
Son como flores hermosas
Que a jardines embellecen.
Como lindos pajarillos
Que con sus trinos ofrecen
Esas lindas melodias...
Que al corazon enternecen.
Con voces angelicales
Dan ofrenda de alabanza,
Ofrenda de olor fragante
Al Dios de toda esperanza.
Y El los oye desde el cielo
Y los mira con ternura;
Los colma de bendiciones...
Llena de amor y dulzura.
Adelante niños santos!
Niños que son diferentes,
Que rinden a Dios sus cantos
Y predican a las gentes.
El mundo los necesita
Aunque no los reconoce,
Pues son como lucecitas
Que disipan las tinieblas
De aquel, que a Dios no conoce.
Quiero que sepan niñitos,
Que oro al Señorcada dia...
Para que sean instrumentos
De bendicion ... y alegria.
Y alcancen multitudes
Que se pierden por montones,
Que con sus vidas brillantes
Penetren sus corazones.
Mi Puerto Rico se hunde
Sin Dios ... y con desesperanza,
Pero las joyas de Cristo
Traen mensajes de esperanza.
Por eso es que los exhorto
A que sigan adelante,
Que se sigan esforzando,
Que El Señor cual gran gigante
Paso a paso los va guiando.
Si el Señores con ustedes
No tienen porque temer,
Si segun El ha vencido...
Ustedes podran vencer.
Joyas de Cristo, al ataque!
Hay almas que rescatar...
Del poder del enemigo,
Y Dios las quiere salvar.
Instrumentos escogidos
Por la mano del Señor,
Con Su poder protegidos
Saturados con Su amor.
Y ese amor van esparciendo
Por donde quiera que van,
Y al enemigo venciendo
Con Jesus ... por capitan.